En cierta ocasión se quejaba un discípulo a su Maestro:
– Siempre nos cuentas historias, pero nunca nos revelas su significado. El Maestro le replicó: – ¿Te gustaría que alguien te ofreciera fruta y la masticara antes de dártela?
Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.plugin cookies